Palco de Prensa
Viernes 10 Abril 2015
Por : Gilberto LAVENANT
Aunque el deporte y la política, no tienen nada que ver, hay ocasiones en que se establece un factor común, entre ambas actividades, que es la codicia de los políticos, y todo se echa a perder.
Esta semana trascendió, un conflicto judicial, que podrán identificar como “El Zonkeysgate”, en el que resultan involucrados, como principales protagonistas, empresarios y políticos, que podría afectar seriamente a los aficionados del llamado “deporte ráfaga”.
Deben saber, que en esta fronteriza ciudad, ha surgido un equipo de basquetbol, denominado “Tijuana Zonkeys”, con excelentes perspectivas. En el 2014, logró el campeonato del Circuito de Baloncesto de la Costa del Pacífico, conocido simplemente como Cibacopa.
Esta semana, al iniciar la temporada 2015, enfrentándose a Náuticos de Mazatlán, trascendió que el empresario de la construcción, Rafael Carrillo Barrón, pretende apropiarse de los Zonkeys.
Durante la presentación del equipo, el pasado martes, Naser Millanes, Director Deportivo del equipo, comentó el tema, aunque aclaró que no es abogado y por ello no profundizó al respecto.
Lo más que dijo es que : “se rumora por ahí varias cosas sobre el tema legal del equipo, pero mientras nosotros tengamos un registro, roster y coach ante la Liga, eso es lo que nos respalda. De eso, se tiene que preocupar el abogado de nosotros. Yo vengo a hacer baloncesto”.
Luego observó, que hasta no ver un documento legal, indicando que él no lo había visto, no era su tema y que ellos van a seguir con la franquicia. Incluso preciso que el dueño de Zonkeys es Darren Naiman.
Bajo tales expectativas, nada agradables, en un duelo que al final los Zonkeys perdieron ante los Náuticos de Mazatlán, se llevó a cabo la inauguración de la temporada 2015, en el Auditorio de Tijuana.
Al terminar la semana, trascendió lo del proceso judicial, que podría ensombrecer el futuro de los Tijuana Zonkeys y el riesgo de que se llegue a truncar el posible bicampeonato, en este 2015. Incluso, que Tijuana se quede sin basquetbol profesional.
La cuestión es que, el surgimiento de un equipo deportivo profesional, implica una fuerte inversión, en tanto logra consolidarse, deportiva y económicamente.
En el 2014, fueron patrocinados por el empresario tijuanense Pablo Rafael Carrillo Barrón, quien ahora pretende apoderarse de la franquicia.
Para ello, con las constancias de los gastos que efectuó en el 2014, tales como sueldos de jugadores, boletos de avión, costo de servicios de seguridad durante los eventos deportivos, entre otros, por conducto de su hijo Rafael Omar Carrillo Fregoso, promovió juicio ordinario mercantil, registrado bajo expediente 337/2015, del índice del Juzgado Cuarto de lo Civil del Partido Judicial de Tijuana, cuyo titular es el Lic. Alejandro Isaac Fragozo López.
El empresario, cedió a favor de su hijo Rafael Omar, sus supuestos derechos, respecto al equipo de Zonkeys, y este, en su escrito inicial de demanda, solicitó se le concedieran, como providencias precautorias, o sea aún antes de que se acreditaran tales supuestos derechos, y se emita la sentencia definitiva correspondiente, y cuyo procedimiento podría prolongarse durante muchísimos meses, el operar y dirigir el equipo.
De paso, intervenir en la liga “Cibacopa”, durante la temporada 2015, “y hasta en tanto se resuelva el fondo de la litis planteada”, dándole, de un plumazo, de manera absurda la representación legal, así como el manejo deportivo de los Zonkeys.
El juzgador, actuando con extrema “gentileza”, concedió todas las providencias precautorias solicitadas por Carrillo Fregoso, fijándo fianza por un monto de 906 mil 336 pesos, a fin de garantizar los posibles daños y perjuicios, que pudiese ocasionar el procedimiento a la parte demandada, señalando como tal, a la empresa Hollywood Sports & Entertainment, S. de R.L. de C.V y Cibacopa Properties, S.A. de C.V.
Aunque, como dice Millanes, Director Deportivo de Zonkeys, esto es un tema a tratar por los abogados del equipo de basquetbol, el Juez Cuarto de lo Civil, bajo el disfraz de “providencias precautorias”, concedió a Carrillo Barrón, a través de su hijo Rafael Omar, la operación y dirección del conjunto de basquetbolistas, en base a un adeudo de dinero, dentro de un juicio ordinario mercantil, cuyo final podría llegar hasta dentro de dos o tres años. ¡Qué chulada!
En base a esta resolución, de fecha 14 de marzo del año en curso, el empresario de la construcción, por conducto de su hijo, intentó sorprender a las autoridades municipales, para que le dieran en arrendamiento el Auditorio de Tijuana, cuya relación contractual, ya está a favor de la empresa que opera la franquicia de Tijuana Zonkeys.
El asunto se pone interesante, si se observa, que Carrillo Barrón, es padre de Christian Alejandro Carrillo Fregoso, suplente del panista Jorge Ramos Hernández, candidato a Diputado Federal por el IV Distrito Electoral Federal y a quien, de ganar en los comicios del próximo 7 de junio, cedería la curul, para él prepararse para contender por la gubernatura estatal en el 2018.
Al apoderarse de los Zonkeys, Ramos Hernández haría campaña gratis, al aparecer como “invitado especial” en los encuentros del equipo de basquetbol. Cuando los políticos meten las manos, en una actividad determinada, todo se echa a perder.
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