sábado, 5 de abril de 2014

La rebelión priísta., por : Gilberto Lavenant Sifuentes

Palco de Prensa
Sábado 5 Abril 2014    
                 La rebelión priísta.   

                     Por : Gilberto LAVENANT

Teniendo como base, que la disciplina partidista –algunos le llaman simplemente sumisión o agachismo- es casi una ley inviolable, para los priístas, el pasado martes 11 de marzo llegaron a Baja California enviados del CEN del PRI, a poner en marcha los preparativos para participar en las elecciones intermedias del 2015.

José Encarnación Alfaro, Secretario de Organización del Comité Ejecutivo Nacional del partido tricolor, el Senador Héctor Yunes Landa, Delegado Regional, quien por cierto, en los comicios de 2013, para la gubernatura, entregó “cuentas mochas”, con la derrota del candidato priísta a la gubernatura, y el político poblano José Oscar Aguilar González, nuevo delegado especial, los comisionados.

Este último, ni se imaginaba el paquete que estaba recibiendo, un partido fraccionado en dos partes irreconciliables, los castrotrentistas y los hankistas, y un ambiente de rechazo hacia los políticos en general, en especial, por los efectos negativos de la reforma hacendaria promovida por el Presidente Enrique Peña Nieto, que implicó la homologación del IVA, o sea, elevar la tasa del 11% al 16%.

Alfaro y Yunes, le han de haber dicho al poblano, que luego de haber enviado a Argentina, a Fernando Catsro Trenti, líder de los castrotrentistas, como embajador de México, las cosas serían sencillas, pues en su ausencia, sería fácil manipular a sus seguidores,  de forma tal que el problema del divisionismo, consistiría simplemente en someter a los hankistas.

Sin embargo, las cosas se complicaron, cuando, en su presentación, ante los priístas bajacalifornianos, casi con descaro se evidenció que traían la consigna del dirigente nacional del PRI, César Camacho, de ratificar o imponer en la dirigencia estatal priísta, a la aún encargada del despacho, la exdiputada local, Nancy Sánchez.

Aunque casi todos los tricolores, ahí presentes, contuvieron su coraje, al menos uno de ellos, José Osuna, aspirante a ocupar la silla de Nancy Sánchez, externó que los priístas de la entidad reclaman un proceso democrático, para elegir a quienes les coordinará, hacia los comicios del 2015.

No parecieron escuchar el reclamo, pues en las reuniones con otros priístas, insistieron en la misma cantaleta : ya no hay tiempo, en aras de la unidad partidista y de lograr la fortaleza partidista requerida para alcanzar el triunfo electoral, es recomendable dejar en el cargo a Nancy.

La aludida, feliz de la vida. Para ella, sería una excelente oportunidad, el continuar en el cargo, porque podría tener bajo su control, el proceso de selección de candidatos priístas a las 8 diputaciones federales de Baja California y estaría en contacto con César Camacho, quien, por tales “servicios”, podría recompensarla con una diputación de lista.

Olvidó, que ella misma es una de las personas responsables, de la derrota electoral priísta del 2013. También olvidó, que en su afán de congraciarse con el Presidente Peña Nieto, se friccionó con representantes del sector empresarial, que descalificaban los supuestos beneficios de la reforma hacendaria.

Así mismo, se le olvidó, que es una de las principales representantes del castrotentismo, fiel seguidora del diputado federal con licencia, y por lo tanto, el dejarla en el cargo, es como un premio al excandidato a la gubernatura, y una fea ofensa o agravio, para los hankistas, que veían, como una oportunidad ideal, la posibilidad de obtener para ellos la dirigencia estatal del PRI, para, desde ahí, aniquilar los restos del castrotentismo.

Los propios priístas, ajenos a los castrotrentistas y hankistas, han considerado que necesitan rebelarse, para impedir que el castrotrentismo continue teniendo al priísmo, bajo su control, y han decidido manifestar su malestar a César Camacho, y pugnar porque la elección del dirigente estatal priísta, se lleve a cabo mediante un proceso democrático, al margen de consignas o imposiciones.

El primer reclamo formal, lo hizo esta semana la Agrupación Política de Baja California, actualmente bajo la coordinación de Ricardo Torres Coto, mediante un escrito que con fecha 2 de abril, dirigió a César Camacho, dirigente nacional del PRI, pidiendo que se lleve a cabo la renovación de los Consejos Políticos estatal y municipales, para luego efectuar una elección democrática de sus nuevos dirigentes.

Claramente le advierten, que si esto no se hace así, o sea que si insisten en hacer efectiva la consigna, en el sentido de imponer a la castrotrentista Nancy Sánchez, “habrá protestas y justas inconformidades, que fundamentalmente se reflejarán en las elecciones federales del año 2015, las cuales ya de por sí se vislumbran muy difíciles para nuestros futuros candidatos”.

Así mismo, le advierten a Camacho, que : “están bajo su responsabilidad las decisiones y acciones que se tomen, para enviar un mensaje a la ciudadanía y al priísmo, con respecto a la corrupción local. los beneficios inmediatos que traerán las reformas y la democracia interna del Partido”.

La APBC, es una organización emblemática para los priístas, pues nació hace más de 30 años, enarbolando la bandera del nativismo, en contra del centralismo, por la designación anticipada del General Hermenegildo Cuencia Díaz, como candidato priísta a la gubernatura de Baja California.

La bandera que les hizo agruparse, prácticamente quedó sin sustento, al fallecer Cuenca Díaz, en plena campaña, el 17 de mayo de 1977, y ser designado en su sustitución, Roberto de la Madrid Romandía, amigo del Presidente López Portillo. Todo indica que la APBC, se prepara para luchar, de nueva cuenta, contra el centralismo. Empieza la rebelión priísta.

                                                                                                

                                                                                                    gillavenant@gmail.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario