*Rueda la cabeza del delegado de Otay Centenario, David Alberto Frías Mongil
*Miriam del Sol Merino, ha sido designada como encargada de despacho
*Miriam del Sol Merino, ha sido designada como encargada de despacho
Gabriel Xala
Tal como lo habíamos pronosticado en una columna anterior, poco le duró el gusto al delegado de Otay Centenario, licenciado David Alberto Frías Mongíl, al ser removido de su cargo, quedando como encargada de despacho la secretaria de la delegación, Miriam del Sol Merino, todo esto debido a múltiples quejas de líderes de colonias, además de su elevado temperamento y su rencillas con el personal que laboraba con él en la delegación, a los que les gritaba de manera prepotente.
Eso sin contar con una “pequeñísima” discusión que tuvo en las pasadas elecciones con la candidata oficial del ayuntamiento, Rosa Aurora Martínez Herrera, en donde esta persona le reclamó sobre el proceder del ex delegado Frías Mongíl, hacía las líderes a las que no les daba respuesta a sus peticiones y algunas hasta regañadas salían, -pues bien- resulta y acontece que el flamante ex delegado le respondió a la Güera, -porque así le gusta que le digan a la ahora regidora- que lo acusara con el presidente, total él era muy amigo del alcalde, Tómala!!, pues lo más seguro que eso no se podía quedar así, y este es parte del resultado a la soberbia.
También es digno de mencionar que en realidad la incapacidad de Frías Mongíl quedó de manifiesto, ya que en un recorrido que se le ha hecho a la demarcación, nos encontramos con una infinidad de calles que se encuentran demasiada olvidadas, hay calles que desde antes que el ex delegado tomara posesión ya se hallaban en pésimas condiciones y que hasta el día de hoy continua peor que antes.
El tema de las luminarias en donde nada más se echan la bolita unos a otros también es otro tema, en los que son el bacheo y las luminarias siempre comentaba que ese era problema del departamento de la DOIUM, en lo que respecta a luminarias que el problema era del ayuntamiento, y que él no podía hacer nada al respecto; una persona que ocupa un cargo para representar al presidente, debe tener la capacidad para solucionar los problemas, no para hacerlo más grande.
Es así que una vez más, hay un cambio de delegado y en esta ocasión le tocó el turno a la delegación de Otay Centenario, esperando que el próximo delegado o delegada, tenga la suficiente capacidad de trabajar en favor de la gente, y que no le permita a la soberbia y al despotismo que entre en su Corazón, porque bien deben de saber que según el trabajo que desempeñe es lo que lo va a recomendar con sus patrones (el pueblo) quien es el que en realidad le paga su salario para que viva bien, en este caso la actual encargada de despacho, Míriam del Sol Merino debe y tiene la obligación de hacer un buen trabajo… si quiere permanecer.
Por último me despido con una frase de don Benito Pablo Juárez García, que va de acorde al tema y para todo aquel funcionario que se le olvida su procedencia, y porque no, también a muchas personas que piensan y creen que no necesitan de nadie y les juegan chueco.
“Nunca abuses del poder, humillando a tus semejantes; porque el poder termina y el recuerdo perdura”
Espero lo entienda, juan para que se lo diga a pedro, sin más que agregar nos estaremos leyendo en la siguiente entrega, pásenla muy bien.
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